Observador Ciudadano®: noviembre 2015
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Enfermedad por Reflujo Esófago Gástrico (ERGE)




Abigail Bello Gallardo


“Goza inteligentemente de los placeres de la mesa”. 
Epicuro.


Cuatro de cada diez mexicanos padecen de reflujo gastroesofágico (Asociación Mexicana de Gastroenterología y la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012).

 

La Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE) es un padecimiento en donde el contenido que hay en el estómago (alimento o líquido) se devuelve hacia arriba, al esófago (conducto que va desde la boca hasta el estómago), pudiendo llegar a dañar al esófago, la laringe, garganta, boca, lengua, dientes y causar sinusitis, en el día o mientras se duerme (Enfermedad por reflujo gastroesofágico. Servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU. Institutos Nacionales de Salud).


 

En los casos más graves la Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico podría provocar cáncer del esófago (Doctor Rafael Aguirre Cardoza, Gastroenterólogo, miembro de la Asociación Mexicana de Gastroenterología y del Consenso Mexicano de Enfermedad Por Reflujo Gastroesofágico).

Aunque la enfermedad por reflujo gastroesofágico o ERGE puede presentarse en los niños y bebés con síntomas parecidos a los de los adultos, es más frecuente a partir de los 40 años de edad (Enfermedad de reflujo gastroesofágico, ERGE. Astrazeneca. © EPG Patient Direct 2013.).

El dolor y el malestar provocados por la Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico pueden perjudicar nuestra vida en general con la familia, la pareja y los amigos ya que se teme convivir compartiendo alimentos y bebidas por temor a sufrir dolor; y también puede dañar el desempeño del trabajo, ya que cuando el malestar es intenso, se debe dormir sentado, siendo  difícil trabajar a gusto al día siguiente.

Síntomas frecuentes en la ERGE:
-Agruras (pirosis) sensación de ardor detrás del hueso llamado esternón (se encuentra en el tórax anterior- en el pecho-).
-Regurgitación, se define como el retorno sin esfuerzo del contenido (sólido o líquido) proveniente del estómago o del duodeno hacia el esófago y que puede alcanzar la orofaringe (garganta).
-Acidez  que se presenta más de dos veces a la semana.
-Náusea antes o después de comer.

-Dolor urgente en el pecho (bajo el esternón) que aumenta al agacharse, al inclinar el cuerpo repentinamente, al acostarse o comer; es más probable o peor el dolor en el pecho en la noche.

El dolor en el pecho, que  muchos pacientes asocian con sufrir un infarto, solo puede descartarse acudiendo a recibir atención médica (Enfermedad por reflujo gastroesofágico. Servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU. Institutos Nacionales de la Salud –NIH-).

-Mal aliento (halitosis).
-Gases y eructos.

-Padecer hipo.

-Distenderse o sentirse hinchado del estómago o sentir que se indigestó.
-Tos, especialmente por la noche.


-Puede tener ronquera, dolor de garganta, cambio de voz y carraspeo.
-Desarrollar problemas crónicos de senos nasales (sinusitis).
-Provocar que se presente asma o sibilancias en el pecho (pulmones) o empeorar  este padecimiento.
-Ahogamiento (tos y dificultad para respirar).
-Hay personas que pueden padecer enfermedades de los dientes y de la boca, ya sean leves o muy graves.
En los casos más graves:

-Dificultad para deglutir (tragar los alimentos).

-Vómitos frecuentes.
-Sangrado al vomitar o al evacuar (ya sea sangre color rojo, café o negro).

-Pérdida grave de peso.

-Algunas personas que sufren reflujo pueden complicarse y padecer una delicada enfermedad llamada Esófago de Barrett.
-Existe un riesgo de desarrollar cáncer de esófago si se padece reflujo ácido constante.

El embarazo e ingerir diversos medicamentos pueden producir o empeorar el reflujo gastroesofágico.
Ejemplo de padecimientos en los que se utilizan algunos medicamentos que podrían causar ERGE:
El vértigo o mareo, la presión arterial (hipertensión), unas enfermedades del corazón, para el asma, el mal de Parkinson, para el sangrado menstrual anormal; medicamentos sedantes para el insomnio o la ansiedad, para el dolor o la inflamación, para la depresión, etcétera.
También la ingesta de algunos medicamentos anticonceptivos; u otros fármacos como la tetraciclina, los suplementos del hierro, etcétera, pueden provocarlo.
Si usted sospecha que uno de los medicamentos le puede estar causando acidez gástrica, inmediatamente coméntelo con su médico.

El especialista en diagnosticar y tratar la Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico  o ERGE es el Gastroenterólogo.
En el caso de los niños es el gastroenterólogo pediatra.  

 

Tratamiento
La Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico debe tratarse de acuerdo a su causa. Por ejemplo si la causa es la acidez: “... Los mejores resultados para eliminar la acidez, se han observado con los inhibidores de la bomba de protones como el omeprazol. La duración con este tratamiento puede ser de 6 a 8 semanas…” (Doctor Ricardo Raña Garibay, Gastroenterólogo, miembro de la Asociación Mexicana de Gastroenterología -AMG-. Crónica.com.mx. Agosto 2013. Dirección electrónica: http://www.cronica.com.mx/notas/2013/775685.html).

También se pueden requerir de especializados procedimientos gastroenterológicos y en algunos casos la cirugía (operación).

Independientemente de la causa a la que se deba la ERGE es imperativo mejorar los hábitos diarios.
Recomendaciones:
-Levante la cabecera de su cama más o menos 13 centímetros. No use almohadas apiladas porque esto coloca su cuerpo en una posición flexionada que agrava el problema al aumentar la presión sobre el abdomen.
-Ingiera comida por lo menos tres a cuatro horas antes de acostarse, y evite comer al momento de acostarse.
-Coma porciones moderadas de alimentos y haga comidas menos abundantes.
-Mantenga un peso corporal saludable para eliminar cualquier presión dentro del abdomen innecesaria, debido al sobrepeso.
-Reduzca o elimine el consumo de alimentos grasosos y chocolate, menta, café, té, aguas gaseosas (principalmente colas), y alcohol -todos los anteriores causan relajación del esfínter esofágico inferior y por ello también el alimento puede salirse del estómago y producir reflujo– así como tomates, alimentos cítricos o ácidos (frutas o jugos), ya que éstos proporcionan ácido adicional, que puede irritar el esófago.
-Deje de fumar. El tabaco también relaja el esfínter esofágico inferior.
-Evite usar ropa ajustada alrededor del estómago, puede empeorar el reflujo.
-No se automedique ácido acetilsalicílico, naproxeno, ibuprofeno, piroxicam y nunca nimesulida (revise la fórmula de sus medicamentos).

Prevención de la Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE)
Cuide su alimentación, tenga orden en sus alimentos (por ejemplo haga tres comidas y dos colaciones –tentempiés-). Su estómago tiene que estar con alimento porque esto le ayuda a neutralizar la acidez.
Evite el tabaco, las grasas (sobre todo animales), condimentos, los jugos cítricos (ácidos) y todos los irritantes como las salsas picantes, el café, el alcohol, el chocolate, etcétera (Doctor Ricardo Raña, Gastroenterólogo. Crónica.com.mx. Agosto 2013).

Como siempre insisto en la necesidad de que las instituciones de salud federales, estatales y municipales informen de manera clara, breve y frecuente, a través de todos los medios de comunicación, acerca de las enfermedades, sus complicaciones y la manera de prevenirlas.

En otros temas, dentro de los trabajos de la “Semana Nacional de Gastroenterología” que se llevó a cabo en la ciudad de Querétaro, Qro., del 14 al 18 de noviembre de este año, fue presentado el excelente libro, único y primero en su tipo llamado “Perfil clínico multidimensional para trastornos funcionales gastrointestinales”, editado por la Fundación de Roma, enfocado de manera práctica al tratamiento integral e individualizado de cada paciente. Este libro está dirigido a los gastroenterólogos pero también a todos los médicos, incluídos los del primer nivel de atención. El autor es el ilustre doctor Douglas A. Drossman y colaboradores. Lo recomiendo ampliamente, incluso a los médicos residentes de las especialidades de medicina familiar, medicina interna y de gastroenterología.















La  artritis gotosa o gota


Abigail Bello Gallardo


“La felicidad radica, ante todo en la salud”.
George William Curtis.


La artritis gotosa o gota es la complicación más frecuente de la elevación en sangre del ácido úrico (hiperuricemia). La hiperuricemia se observa hasta en el 5 al 15% de la población general en México (Guías de diagnóstico y tratamiento. Servicio de Reumatología).

En general, se considera elevado el ácido úrico en la sangre por encima de 7 mg/dl en mujeres y de 8 mg/dl en hombres.  

De acuerdo con estimaciones epidemiológicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 1% de la población (más de un 1,000,000 de mexicanos)  padece gota, presentándose más en los hombres en una relación 20 a 1, situación que tiende a equilibrarse cuando las mujeres llegan a la menopausia.

La gota ataca cada vez con más frecuencia a la población menor de 40 años, lo que se debe en gran medida a las altas concentraciones de ácido úrico que poseen los alimentos que se consumen habitualmente.

Hasta hace unos cuantos años la gota se consideraba característico de la tercera edad, pero hoy cobra especial notoriedad, ya que se ha comprobado que está “tocando a la puerta” de individuos con edad entre 40 y 50 años, los cuales, lamentablemente, también pertenecen a la población que padece alguna otra enfermedad crónica (Hoy la gota ataca a edades más tempranas. Reumatólogo Miguel Ángel Saavedra Salinas, Centro Médico Nacional La Raza, Instituto Mexicano del Seguro Social).



La gota es el depósito de cristales (de urato monosódico) dentro de las articulaciones que se manifiestan como protuberancias o abultamientos palpables debajo de la piel  que pueden llegar a drenar material blanquecino, sobre todo en el dedo “gordo” del pie, pero también puede presentarse en el empeine del pie, tobillo, rodilla, codo, muñeca, mano, etcétera.
El dolor comienza súbitamente, a menudo durante la tarde y noche, y con frecuencia se describe como pulsátil, opresivo o insoportable. La articulación aparece caliente y roja. Por lo regular está muy sensible (duele al ponerle incluso una sábana o cobija encima). También se puede sentir escalofrío, presentar fiebre, taquicardia, pérdida de apetito y  sensación general de enfermedad.

Este ataque o crisis de gota puede desaparecer en varios días, pero también puede retornar de vez en cuando (Hiperuricemia y gota. Eliseo Pascual Gómez, Catedrático de Medicina, Reumatología, Universidad Miguel Hernández y Doctora Francisca Sivera Mascaró del Hospital General Universitario de Alicante, España).

Algunas personas pueden desarrollar artritis crónica con daño articular, pérdida de movimiento en las articulaciones, dolor intenso articular y otros síntomas.


Otra complicación de la artritis gotosa o gota son los tofos: depósitos voluminosos de ácido úrico que se desarrollan en el cartílago, tendones y tejidos blandos del cuerpo (incluso en las orejas); por lo regular se desarrollan después de que un paciente ha tenido artritis gotosa durante muchos años y no se ha tratado especializadamente.




Tratamiento
El tratamiento incluye dieta apropiada, hacer deporte, tomar mucha agua, ingerir medicamentos para disminuir el ácido úrico, la inflamación y el dolor; realizar procedimientos especializados, rehabilitación física, apoyo psicológico y en algunos casos, la cirugía (operación).



Solo es preciso tomar medicamentos si existen síntomas dolorosos, inflamatorios o si se superan valores de 12-13 mg/dl  (Guía Práctica de la Salud 11. Enfermedades del metabolismo. Ácido úrico y gota. Hiperuricemia. Clínica Endocrinológica. Dr. Enciso; España).
El objetivo del tratamiento debe ser reducir los niveles de ácido úrico por debajo de 5 mg/dl.

Por favor no se automedique porque algunos medicamentos para el dolor pueden elevar el ácido úrico.

El especialista en diagnosticar y tratar la artritis gotosa o gota es el reumatólogo.

Prevención
Para prevenir la gota se debe evitar la obesidad, controlar estrictamente la diabetes y  presión elevada, así como consumir dieta baja en grasas.
Es fundamental, asimismo, acudir con un especialista si sospechamos de algún padecimiento renal (enfermedad en los riñones como la insuficiencia renal o cálculos en los riñones) y evitar el consumo de bebidas alcohólicas.
Atender esta enfermedad en sus etapas tempranas es importantísimo, ya que en esta fase no hay destrucción articular y lo más seguro es que el tratamiento tenga éxito y permita al enfermo reintegrarse rápidamente a sus actividades diarias.
Sin embargo, muchas veces el paciente piensa que lo que le pasa no es grave y continúa comportándose de la misma forma. En dichas circunstancias, su principal enemigo es él mismo, ya que es muy difícil hacerle comprender que debe cambiar sus hábitos y los factores que le llevaron a padecer la enfermedad (Hoy la gota ataca a edades más tempranas. Reumatólogo Miguel Ángel Saavedra Salinas, Centro Médico Nacional La Raza, Instituto Mexicano del Seguro Social).

El nutriólogo  puede indicarle una alimentación apropiada para  reducir los niveles de acido úrico en sangre. Sin embargo, menciono a continuación algunos alimentos que debe eliminar de su alimentación si sufre una crisis de artritis gotosa, hasta que supere la crisis:
-Vísceras (hígado, sesos, riñón, mondongo, corazón, criadillas, riñones), mariscos, pescado azul (anchoas, sardinas, arenques), atún, camarones, langostas, mejillones, embutidos y carnes rojas, los cubos de caldo para sopa, consomé, el ganso, el extracto de carne, champiñones, espinacas, espárragos, coliflor, helados, alimentos fritos, carne molida, cerveza, bebidas alcohólicas (brandy, whisky, ron, ginebra y vodka). 

-Aumente el consumo de líquidos (agua y bebidas naturales). Es importante tener un consumo de 3 litros de líquidos al día, ya que esto va a favorecer la eliminación del ácido úrico a través de la orina, evitando los cálculo o “piedras” de ácido úrico en el riñón.

-Evite los jugos empaquetados y los refrescos debido a que contienen fructosa en forma de jarabe de maíz alto en fructosa, ya que este azúcar estimula la producción de ácido úrico.

-Hay estudios que han encontrado que algunos nutrientes como el ácido fólico, la niacina (vitamina B3), tienen efectos beneficiosos para disminuir los altos niveles  de ácido úrico en la sangre y por ello es bueno ingerirlos (GeoSalud. Cuidados en la dieta para disminuir el ácido úrico. Nutricionista Daniela Cordero. Touger-Decker, R. Nutrición y dietoterapia de Krause. 9º Edición. México). 

-Elimine el sobrepeso, gradualmente.

-Evite los ayunos prolongados (de más de 5 horas durante el día).

-Si el médico le receta medicamentos para prevenir la gota o los cálculos en el riñón, es importante que lleve su tratamiento al pie de la letra y que nunca suspenda el tratamiento sin la indicación de su médico, aunque usted “ya se sienta bien”.  

-El reposo y el frío local también le harán sentirse mejor.

-Si sabe que tiene el ácido úrico elevado o padece gota, cuando vaya a tomar medicamentos nuevos, coméntelo con su médico.

Como siempre, insisto en la necesidad de que las instituciones de salud en México, informen a la población de manera sencilla, breve y frecuente, a través de todos los medios de comunicación, acerca de las enfermedades y de cómo prevenirlas, e implementar políticas públicas de salud eficaces hasta que realmente disminuyan.
















La gastritis


 Abigail Bello Gallardo





 “… La salud de todo el cuerpo se fragüa en la oficina del estómago”.
Miguel de Cervantes Saavedra.


  
La gastritis es una enfermedad que según algunos expertos afecta al ochenta por ciento de los mexicanos, aunque otros aseguran que solo la padecen cuarenta millones de personas.

La gastritis es sin duda una de las enfermedades más comunes que padece nuestra población. Es la inflamación del recubrimiento interno del estómago, por la acción del jugo gástrico (Dr. Ricardo Raña Garibay; Asociación Mexicana de Gastroenterología).
Esta enfermedad no distingue raza, género ni edad, pues afecta incluso a los niños, en quienes tanto el cuadro clínico como el tratamiento son parecidos a los de los adultos.

Aunque tiene un fuerte impacto en la calidad de vida, muchos se resignan a vivir con la enfermedad, se automedican (causándose enfermedades en los riñones o en otros órganos) o no reciben tratamiento adecuado por falta de un diagnóstico oportuno (Redacción de El País; Colombia).

Puede durar por un corto tiempo -gastritis aguda-, meses o años -gastritis crónica- (Gastritis. Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU. NIH. MedlinePlus).

Síntomas
Los síntomas principales de la gastritis son:
-Dolor tipo ardoroso en la “boca del estómago”.
-Sensación de vacío o hueco, que al tomar alimento aumenta momentáneamente para luego disminuir.
-Sensación de llenura temprana, es decir, se quita el apetito con los primeros bocados.
-Náusea (sensación de querer vomitar) y hasta presentar vómito para aliviar las molestias (Dr. Ricardo Raña Garibay; Asociación Mexicana de Gastroenterología).

Si la gastritis está causando sangrado del revestimiento del estómago, los síntomas que se pueden presentar son: Evacuaciones de color negro, vómitos con sangre fresca, vómitos obscuros o de sangre digerida.

Las causas más comunes de la gastritis son:
-Fumar, ingerir alcohol, malos hábitos alimenticios e higiénicos, la infección del estómago por una bacteria llamada Helicobacter pylori.
-También el reflujo de la bilis hacia el estómago puede producir gastritis.
-El consumo de cocaína.
-Ingerir o beber sustancias corrosivas o cáusticas (como venenos).
-Padecer estrés.
-Sufrir infecciones virales, por ejemplo por citomegalovirus y por el virus del herpes simple, especialmente en personas con un sistema inmunológico débil.
-También puede producir gastritis un traumatismo (golpe, accidente) o una enfermedad repentina y grave, por la que haya que practicarse una cirugía mayor en cabeza, cuello, tórax y abdomen (Yale School of Medicine).
-La pancreatitis y la insuficiencia renal también pueden causar gastritis.
-El hecho de estar con un respirador igualmente pueden causar gastritis, entre muchas otras (Gastritis. Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU. NIH. MedlinePlus).
 
La ingesta de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos como la aspirina, diclofenaco, naproxeno, ibuprofeno, ketorolaco, etcétera también puede causar gastritis.

Debido a la importancia que tiene la bacteria Helicobacter pylori en la gastritis, comentaré al respecto.

La infección por Helicobacter pylori está relacionada con la mala calidad del agua potable, con el hacinamiento, el manejo poco higiénico de los alimentos, con la indisponibilidad de drenaje y con el bajo nivel sociocultural y económico de la población (Dr. Ricardo Raña Garibay; Asociación Mexicana de Gastroenterología).

La bacteria Helicobacter pylori contamina exclusivamente al humano, se aloja en la mucosa del estómago y llega a mantenerse ahí por años sin desarrollar ninguna molestia.
En la mayoría de los casos la infección se adquiere en la infancia y los síntomas de la gastritis se pueden presentar hasta treinta años después.
Datos proporcionados por el Departamento de Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina-UNAM afirman que cerca del 50 % de la población mundial adulta se encuentra infectada  por la Helicobacter pylori. 
De acuerdo con información epidemiológica en México, 2 de cada 10 mexicanos infectados por ese microorganismo, desarrollará una enfermedad severa como gastritis crónica activa y úlcera péptica, mientras el 1 % podría presentar cáncer en el estómago (Prevalencia de 90 % de la bacteria causante de las gastritis y úlceras. Emir Olivares Alonso. La Jornada).

El médico especialista indicado para diagnosticar y tratar la gastritis es el Gastroenterólogo. Dependiendo de la afectación a otros órganos, el galeno indicará interconsulta con otros especialistas.

Tratamiento
El tratamiento depende de la causa de la gastritis:

En general se indican medicamentos tomados (para el dolor, antibióticos, protectores y regeneradores de la mucosa del estómago) inyectados, intravenosos, estudios especializados como la endoscopia, prueba de aliento (prueba de urea marcado con carbono 13 o 14), la hospitalización, etcétera.
Se recomienda:
-Mejorar los hábitos alimenticios. En la dieta se debe consumir lo mínimo posible comida irritante o condimentada.  Además de suprimir el consumo de café y refrescos, principalmente los de cola.
-Debe comer en horarios establecidos y con calma.
-Evitar los largos períodos de ayuno, ya que cuando hay ayunos prolongados el estómago suele secretar ácido, por lo cual la sensación de hambre y el dolor de la gastritis se incrementan (Dra. Érika Gutiérrez de la Cruz. Maestra en Ciencias de la Salud Pública).
-Cuando la causa es el consumo de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos como los que antes mencionamos, se suspenden y se reemplazan por otros analgésicos como el acetaminofén; siempre previa consulta con su médico.

En el caso de infección por Helicobacter pylori están indicados los antibióticos por periodos de catorce días con amoxicilina, claritromicina; y omepraprazol, pantoprazol, esomeprazol o rabeprazol (Doctor Rafael Aguirre Cardoza, gastroenterólogo endoscopista, Xalapa, Veracruz, México) https://www.youtube.com/watch?v=3dfxkSk3nsw.

Nuestro actual estilo de vida tan ajetreado y estresado, es en parte uno de los grandes causantes de la gastritis; reducir el estrés es parte del tratamiento y también de las medidas preventivas: trate de relajarse, no permita que los problemas de la vida diaria lo agobien, tome la vida con más calma (Dra. Érika Gutiérrez de la Cruz.  Maestra en Ciencias de la Salud Pública).

En la Universidad de Chapingo se han desarrollado fórmulas a base de cancerina y cuachalalate que son efectivas para atender esta enfermedad. El doctor Muñoz recomienda tomar jugo de zanahoria o un preparado de papa cruda para tratar la gastritis (Entrevista En Fórmula con Enrique Muñoz. Para consultar la información, esta es la liga: http://www.radioformula.com.mx/notas.asp?Idn=532709&idFC=2015).

Prevención
Evite el cigarro, el alcohol, las frituras, las harinas, el café, el alcohol cigarro, y el uso prolongado de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos como la aspirina, diclofenaco, naproxeno, ibuprofeno, ketorolaco, etcétera.

Lave bien sus manos con agua y jabón antes de comer, de cocinar o de ir al baño; lave y cocine bien los alimentos, elimine los ayunos prolongados que aumentan la acidez estomacal, fije horarios para las comidas principales, identifique los alimentos irritantes que le generan gastritis y evítelos al máximo. 
Si tiene antecedentes de gastritis crónica atrófica sométase cada año a una endoscopia digestiva.

Si bien el Helicobacter pylori es potencialmente cancerígeno, eso no indica que todas las personas con gastritis vayan a sufrir cáncer gástrico pero se sugiere hacerse exámenes siempre que sea necesario  (Redacción de El País; Colombia).

Como siempre y desde hace años, insisto en la imperiosa necesidad de que las instituciones de salud en México, informen a la población a través de todos los medios de comunicación, de manera sencilla, breve y frecuente acerca de las enfermedades y de cómo prevenirlas.